Piedra del Zodiaco Ópalo

El ópalo es una piedra tan dedicada al ojo, tan agradable a la vista, que inspira amor y esperanza, inocencia y pureza, suerte y felicidad.

El historiador romano, Plinio el Viejo, describió al opalus - el Ópalo, como una piedra preciosa que contiene la llama ardiente del carbunclo (Granate), el púrpura resplandeciente de la Amatista, y la gloria verde mar de la Esmeralda - todos brillando juntos en increíble unión y exquisito placer.

En el mundo antiguo se la consideraba la más hechizante y misteriosa de las gemas, que se llevaba por sus virtudes de aliviar y fortalecer la vista, curar las enfermedades de los ojos y ser capaz de proporcionar gran suerte ya que poseía todas las virtudes de las piedras preciosas cuyos colores residen en ella.

Sin embargo, a pesar de toda su belleza, la reputación de esta "reina de las gemas", durante un tiempo, cayó en desgracia, ligada a rumores, desgracias y misteriosas fatalidades. A pesar de las supersticiones, el ópalo se redimió en el siglo XX, y hoy es una gema absolutamente favorita, especialmente como piedra de nacimiento para los nacidos en octubre. Tradicionalmente, también es el regalo que se hace en el 14º aniversario de boda.

En el mundo metafísico, el ópalo actúa como un prisma dentro del aura, aportando un espectro completo de energía de luz al sistema, potenciando la voluntad de vivir y la alegría de la existencia terrenal. Enciende el optimismo, el entusiasmo y la creatividad, y permite liberar las inhibiciones que inspiran el amor y la pasión.

Esta gema es conocida por su capacidad de sacar a la superficie los rasgos y características propias para su examen y transformación. Al igual que el ópalo absorbe y refleja la luz, recoge los pensamientos y sentimientos, los deseos y las emociones enterradas, amplificándolos y devolviéndolos a la fuente.

Aunque magnificar los atributos negativos de uno puede resultar incómodo, permite comprender lo destructivas que pueden ser estas emociones y ayuda en el proceso de dejarlas ir. El ópalo también ilumina las acciones y emociones positivas del ser, realzando lo bueno y lo verdadero, y fomentando el potencial más elevado de uno.

Es una piedra kármica que recuerda que lo que uno envía volverá. El ópalo aumenta la conciencia cósmica y estimula los destellos de intuición y perspicacia, pero es una piedra protectora para trabajar nuestro interior, meditar y durante los viajes chamánicos del mundo inferior.

El término ópalo es una adaptación del latín opalus, pero se cree que tiene su origen en el sánscrito upala, que significa "piedra preciosa". Las referencias a la gema por parte de Plinio el Viejo sugieren que puede estar relacionada con Ops, la esposa de Saturno y diosa de la fertilidad. También se llamaba opallios en griego, que significa "ver un cambio de color", pederos que significa "el hijo del amor" y paederos "la delicada tez de una joven encantadora". El ópalo llegó a ser conocido como ophthalmos, u ophthalmius, en la Edad Media - "La piedra del ojo", un término que ayudó en parte a hacer honor sus virtudes oftalmológicas.

El ópalo es beneficioso para la salud ocular, el cabello, las uñas y la piel, y puede utilizarse en tratamientos para aclarar y fortalecer la vista, y en el tratamiento de trastornos asociados a los ojos. También es un apoyo en problemas con las hormonas femeninas, el síndrome premenstrual y la menopausia, y proporciona comodidad y facilidad durante el parto.

El ópalo es una piedra de apoyo maravillosa, dedicada a la curación y el fortalecimiento del cuerpo emocional para aquellos dispuestos a mirar con honestidad en el verdadero yo. La elevada energía interna del ópalo hace que los pensamientos y los sentimientos salgan a la superficie para ser examinados, y revela cuál ha sido el estado emocional de uno en el pasado, o incluso en vidas anteriores.

Este proceso de amplificación y limpieza puede ser intenso cuando se trabaja por primera vez con esta piedra, pero con el tiempo enseña a asumir la responsabilidad de los propios sentimientos mientras se limpian las heridas, los miedos y los resentimientos del pasado. Facilita el abandono de comportamientos negativos y calma el cuerpo frente a estados emocionales, permitiendo el autocontrol.

Ayuda a ser más positivo y cariñoso, más creativo y espontáneo. Conocida como la "piedra de los sueños y los cambios felices", el ópalo aporta felicidad al comprender que uno tiene un potencial ilimitado y que es inherentemente perfecto, y que el cambio llega con situaciones y acciones que permiten elevar las propias aspiraciones.

El ópalo se presenta en casi todos los colores, y las energías de los colores dominantes pueden utilizarse para estimular los chakras correspondientes. El brillante juego de colores de muchos ópalos es útil para activar varios chakras y vincularlos al chakra corona, infundiendo el aura con un espectro completo de luz beneficioso para la curación.

El ópalo es un vehículo maravilloso para llevar la luz espiritual al aura, despertando las cualidades psíquicas y místicas de nuestro ser, aumentando la conciencia cósmica y elevando el nivel de intuición y perspicacia. Se ha utilizado tradicionalmente para invocar visiones, aumentar los sueños lúcidos y como protector y guía chamánico en el viaje al interior del ser para la curación o en la regresión a vidas pasadas. El ópalo estaba asociado a Hermes/Mercurio, que transportaba las almas de los muertos al inframundo, y hoy ayuda a quienes deben entrar en estos reinos para facilitar el paso de los espíritus y fantasmas a los reinos superiores.

Como piedra de luz, el ópalo es ideal para atraer las energías angélicas y aumentar las comunicaciones con lo Divino. También es una piedra de agua, con la vibración perfecta para conectar con las fuerzas dévicas del agua, incluidos los devas de la familia ondina, como los sirénidos y los seres de agua. La conexión con la energía azul-verde de las piedras de agua también permite la comunicación entre especies con los delfines y las ballenas, y los misterios atlantes pueden ser recogidos a través de la canalización o la escritura automática utilizando esta piedra.

Durante la Edad Media, un amuleto de ópalo, o uno que contuviera ópalos mezclados con otras gemas, protegía a su portador contra la visión defectuosa, al tiempo que fortalecía la mente y la memoria.

El ópalo se consideraba un talismán que permitía a su dueño reconocer a sus amigos y enemigos. En presencia de un enemigo, el ópalo palidecía, pero en presencia de amigos o aliados se volvía rojo de placer.

El ópalo es amorfo, sin estructura cristalina. Está compuesto de dióxido de silicio y, por lo tanto, es un Cristal Transformador. Los cristales transformadores potencian los esfuerzos por cambiar nuestras situaciones, perspectivas, salud, perspectivas o relaciones. Al transformarnos, transformamos nuestra vida. Aprendemos a bailar, a hablar un nuevo idioma, a fortalecernos o a convertirnos en un mejor cónyuge o hijo. Los cristales con el poder terrestre del Transformador son excelentes talismanes para ayudar a nuestros esfuerzos por crecer, desarrollar nuevas capacidades y cambiar nuestras vidas.